Blogia
aremiscien

...Si, así fue

...poco después empezaron a marcarme "objetivos" a conseguir. Todos los días me encontraba el buzón de correo con no menos de 6 mensajes más los que llegarían a lo largo de la mañana. Mensajes impartiendo instrucciones, informando de rendimientos, etc... ..el teléfono empezó a sonar con mas frecuencia. Cuando no me llamaba un jefe me llamaban dos.
Mis jornadas laborales se fueron alargando, despacio, poco a poco.
De pronto no teníamos "usuarios". Los "usuarios" a partir de entonces se convintieron en "clientes"... ...un horror.
Se amontonaban papeles encima de la mesa, cursos por correo, reuniones cometarros,objetivos, estadísticas...
Mis comidas empezaron a ser irregulares, rápidas e insanas.
Todo ello unido a que siempre he dormido poco, invadió mi vida personal sin darme cuenta. Cuando me reunía con mis amigos casi únicamente les hablaba de trabajo.
Empecé a sentir pinchazos en el pecho puntualmente. Al poco llegó la ansiedad.
Algunos los más próximos, me advertían -nene, tú no estás bien-. Yo lo achacaba al trabajo.

Me levantaba por la mañana y alargaba el café antes de salir a trabajar. Fumo un cigarro y me voy, me decía a mi mismo. Y después encendía otro y lo mismo. Hasta que un día desperté y tras la ducha me sentí como un niño que no quiere ir al colegio por miedo a un examen. La angustia era atenazante, me faltaba el aire... ...y no fui. Ni al dia siguiente, ni al otro.

Quién se ha comido mi queso? No tengo ni idea. Pero ahora sé que no me gusta el queso.

0 comentarios